Me gusta escuchar a las gaviotas,
pues su sonido es un canto de libertad,
me gusta volar, me gusta soñar,
me gusta sonreir y también bailar,
por eso hoy os tiendo mi mano
pues juntos podremos encontrar un lugar,
donde no exista injusticias,
por cuestión de creencias,
razas o tendencia sexual,
sino sólo verdad, amistad y felicidad.
Atravesaré los cielos, atravesaré los mares,
hasta ¡por fin! hallar ese mundo ideal.
Y es que en esta vida hay que saber volar,
extiendo mis manos y alzo el vuelo
para poderlo encontrar.
Con cada nuevo amanecer
voy guardando en mi corazón,
trocitos de ilusiones y esperanzas
que algún día podré hacer realidad.
¡no!, no quiero dejar de volar,
porque quiero encontrar el lugar
donde está mi destino y mi hogar.
Nunca seré vencida,
en la lucha por alcanzar esa realidad,
pues se que cuando llegue la hora
yo te encontraré y tú me encontrarás
y juntos podremos formar un mundo,
lleno de alegría y felicidad,
junto a otros amigos
que en el vuelo nos acompañaran.
Y si algún día mis alas se cansan de tanto volar,
en busca de ese amor que todo lo da,
subiré las escaleras hacia el cielo,
porque allí sí que te podré encontrar.
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