lunes, 25 de abril de 2011

Al compás de tus latidos


Late el corazón y con cada latido
me llenas de alegría
porque tú eres mi destino.
Álzame en tus brazos
y apoya mi cabeza
junto a tu pecho vida mía
porque soy como un niño recién nacido
que necesita seguir escuchando
el compás de tus latidos
pues con él sentiré calor y abrigo
y un amor que nada nos pueda separar.
Necesito oír cada día
el tic-tac sonoro de ese corazón
que a veces me habla a gritos
y me pide sin cesar
que le lleve abrigo pues tiene frío
en este duro caminar.

Y mis oídos torpes por el dolor recibido
se vuelven sordos y no quieren escuchar
pues mi alma tiembla también de frio.
Al caminar se puede perder el sendero
y el cobijo que evita que el frio
congele una mirada enamorada
por eso corazón dame calor
pues mi luz está helada
y no podré verte
ni encontrar la ruta adecuada
para llegar hasta tu morada.

Y busco incansablemente
la madeja de tu vida
para poder agarrarme al hilo
que me sirva de guía
ya que agarrada a él sentiré
que podré encontrarte
y juntos podremos dibujar
ese mundo que ambos soñamos
donde podamos ser felices
y vivir para siempre unidos
al compás de un solo latido.

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